menu icon

Navidad en Viena

Vue aérienne du marché de Noël traditionnel de Vienne (Autriche)

©Calin Stan/Shutterstock

Vive la Navidad en Viena y el fin de año con un estilo Belle Époque. En este viaje invernal a Austria, recorrerás plazas, palacios y castillos iluminados al ritmo de un clásico vals, una ópera de Mozart ¡o incluso un DJ set! Conciertos, luces, mercados, compras, monumentos... Unas fiestas encantadoras y teñidas de romanticismo.

Navidad en la ciudad: ¡un fin de año 100% austriaco y lleno de magia!

¡Te espera una maravilla en cada esquina! En Navidad, todos los lugares emblemáticos de la antigua capital imperial rivalizan en esplendor. Descúbrelos dando un paseo desde el mágico parque del Ayuntamiento hasta los árboles luminosos de la Servitengasse, una de las calles más bonitas de la ciudad de los Habsburgo. O, si lo prefieres, puedes desviarte un poco, alejarte del centro por la Neubaugasse y admirar la iluminación del barrio bohemio.

No te pierdas los grandes clásicos, como las 120 bolas azules gigantes de la Josefstäderstasse, en el distrito 8, las inmensas lámparas de araña de Graben, las bolas rojas de la Rotenturmstrasse o las centelleantes campanas del barrio de Seestadt Aspern, en la otra orilla del Danubio.

Y, si tienes la suerte de ver la ciudad cubierta de un manto blanco, te verás envuelto en una atmósfera romántica que invita a ponerse los patines y deslizarse por la gran pista de hielo de la Rathausplatz o incluso por uno de los brazos helados del Danubio.

Compras navideñas al estilo vienés

En Viena, donde la tradición de los mercados navideños se remonta al siglo XVIII, hay que empezar por el gran Wiener Weihnachtstraum, en la plaza del Ayuntamiento, que abre desde principios de noviembre hasta el 26 de diciembre. La fantasía continúa en la plaza Maria-Theresien, que se convierte en un encantador pueblo navideño entre el museo de Bellas Artes (Kunsthistorische Museum) y el museo de Historia Natural. Otro imprescindible es el mercado del Niño Jesús, en la Freyung, cuyo origen data de 1772; y también merece la pena visitar el mercado de arte Am Hof y el de la iglesia de San Carlos, con puestos de artesanía local. Pero la magia llega a su apogeo en los mercados que se encuentran frente a los palacios con luces  —el palacio de Liechtenstein, el del Belvedere o el de Schönbrunn—, donde saborearás un vino caliente en una bonita taza ilustrada de la ciudad.

Los adornos, que se han vuelto la especialidad de los artesanos vieneses, son el recuerdo perfecto. Te enamorarás tanto de la delicada porcelana de la fábrica Augarten como de los deliciosos dulces: estrellas de pan de jengibre, avellanas doradas o bolsitas de nougat de Demel, repostero de la corte austriaca. También te encantarán los coloridos Papás Noel y renos de hojalata en miniatura que abundan en los puestos de la ciudad. Y qué decir de las bolas de vidrio soplado del Atelier Comploj… ¡Son sencillamente sublimes!

En Viena vivirás un fin de año musical

En la ciudad de Mozart, el fin de año es sinónimo de música. Antes de viajar, consulta el programa del Wiener Konzerthaus y reserva uno de los muchos conciertos de Adviento que se ofrecen. Si prefieres una opción más clásica, opta por las propuestas del Muskiverein o de las iglesias de la ciudad: la iglesia de los Franciscanos Menores, la catedral de San Esteban, la iglesia de los Capuchinos o la iglesia de San Pedro. Otro clásico es el recital de los Niños Cantores de Viena y su «Stille Nacht». En el Stadthalle podrás asistir a un concierto de swing, de música pop o a un musical.

❄️
¡Año nuevo festivo!

Aún no ha terminado tu estancia en Viena, donde la Nochevieja se celebra con numerosas fiestas, como el sendero de San Silvestre. ¡Sus animaciones y actividades dan vida al centro desde las 14:00 hasta las 2:00, con sesiones de DJ por la noche! O, si lo prefieres, puedes asistir al concierto de Año Nuevo de la Orquesta Filarmónica de Viena (¡reserva con varios meses de antelación!).

¡Quien dice Navidad, dice deleitar el paladar!

Según la tradición, en Nochebuena se come carpa frita o rellena y, al día siguiente, un plato de pollo, pavo o pato asado (Weihnchtsgans). La comida termina con una nota dulce, con los postres típicos de diversas formas y sabores: pan de jengibre, estrellas de canela y galletas con mermelada.

Para que el nuevo año venga cargado de éxitos, asegúrate de conseguir galletas de la suerte en forma de pez. Es importante que te las comas empezando por la aleta, ¡si lo haces de otra forma podrías arrepentirte!

Antes de irte, no olvides cumplir con el ritual de una deliciosa parada en el Café Central. En este lugar emblemático de la cultura vienesa que ha inspirado a tantas celebridades, pedirás un capuchino (wiener melange) acompañado de un pastelito (sachertorte, cremeschnitte o strudel).

michelin brand image
picto
PLANIFICA TU VIAJE
Sitios de interés turístico, alojamientos, restaurantes o puntos de recarga… Prepara el viaje que mejor se adapta a ti con ViaMichelin.

¿Ganas de evasión?

Recibe sugerencias de circuitos originales y descubre los lugares que no te deberías perder cerca de tu casa o en tus próximos viajes.