El monasterio de Santa Maria in Valle fue edificado en el emplazamiento del palacio de la corte lombarda, cuya capilla, el sorprendente Tempietto (s. VIII), quedó englobada en el complejo monástico. Auténtica joya y ejemplo único de ornamentación lombarda, está formado por una sala cuadrada coronada por una bóveda de crucería ojival y adornada con magníficos frescos y estucos. El coro de madera es del s. XV.