Esta fortaleza de ladrillo flanqueada por cuatro torres cuadradas (1357-1368) fue rodeada de murallas en 1385 y transformada en prisión en el s. XV. En ella estuvo encarcelado Hugo Grocio desde 1619 hasta 1621, fecha en que consiguió evadirse escondido en el baúl en el que le habían traído libros. Su recuerdo (y el baúl) están presentes en la visita. El resto del lugar recrea la atmósfera y la vida en una fortaleza de la Nieuwe Hollandse Waterlinie, papel que Loevestein desempeñó oficialmente hasta 1951.