Lejos de los demás núcleos de población, una ciudad floreció aquí a partir del s. III d.C., a medio camino entre la región PSUC (al norte) y Petén (al sur). A finales del s. IX periclitó junto a las demás ciudades mayas. Edzná destaca por su elegante Edificio de los Cinco Pisos, una pirámide de cinco niveles (cada uno de ellos con diversas cámaras) y rematado por una crestería. Desde lo alto se divisa toda la meseta yucateca... En el Templo de los Mascarones pueden verse dos máscaras de yeso del dios del sol, Kinich Ahau, representado al amanecer y al anochecer.