Las ruinas feudales del castillo de Alleuze, un gran torreón flanqueado por cuatro torres redondas del s. XIII, se yerguen sobre un promontorio rocoso y desnudo, dominando desde sus casi 30 m el embalse de Grandval más al sur. En Auvernia no hay ningún lugar tan romántico. El lugar está inmerso en un valle boscoso. La D 40, al oeste de Barry, ofrece unas vistas espectaculares del castillo y de las ruinas.